Casi todos nos hemos planteado algún momento vivir en Italia para disfrutar de su inigualable encanto. No obstante, si no se es ciudadano comunitario existen grandes trabas burocráticas y legislativas para vivir en este país .

Afortunadamente existe la Golden Visa, el permiso de residencia mediante inversión que permite vivir en Italia evitando los incómodos trámites de extranjería.

En este artículo contaremos cuáles son las características y principales ventajas de la adquisición del permiso de residencia a través de este método, así como los requisitos que se deben cumplir para poder acceder al mismo.

¿Qué es la Golden Visa italiana?

Desde el año 2017, Italia cuenta con un nuevo programa de visado por inversión. Este programa aplica a los nacionales de cualquier estado no incluido dentro de la Unión Europea que puedan realizar una inversión o donación en Italia, siempre que cumplan con unos requisitos mínimos de inversión.

Este visado, se diferencia de aquellos que aplican en otros países del entorno europeo en la medida en que en Italia sí exige cierta estancia mínima, no siendo posible obtener el visado únicamente con inversión en, por ejemplo, bienes inmuebles (como sí podría ser el caso de otros países como Grecia) para su alquiler.

Requisitos para obtener la Golden Visa

Al margen de los importes de inversión que detallaremos a continuación, existen ciertos requisitos subjetivos que debe cumplir todo aquel que que pretenda optar a la Golden visa:

1. Ser mayor de 18 años de edad.
2. Ser nacional de un país que no sea un Estado Miembro de la Unión Europea (los nacionales de estos países ya pueden beneficiarse del derecho a la libre circulación de personas en todo el territorio de la Unión Europea, pudiendo residir el tiempo que deseen en cualquiera de los Estados Miembros).
3. Demostrar que se carece de cualquier antecedente penal en el país de origen.
4. Demostrar capacidad económica suficiente para poder realizar la inversión/donación que vaya a generar el derecho a obtener el visado de residencia. Asimismo, se deberá poder demostrar que dicha capacidad económica ha sido obtenida a través de medios legalmente aceptados (es decir, que no provenga de actividades ilícitas).

Dicho lo anterior, todas aquellas personas que cumplan con tales requisitos podrán optar a la solicitud de la Golden Visa en la medida en que puedan realizar alguna de las siguientes inversiones/donaciones en territorio italiano:

• Inversión en bonos de deuda emitidos por la República Italiana.
• Inversión en una compañía fundada en Italia y que esté operativa en dicho país.
• Inversión en una start-up italiana.
• Donación filantrópica. Esta donación podrá realizarse en las áreas de cultura, educación, gestión de la inmigración, investigación científica o preservación de la herencia cultural o nacional italiana.

Hasta el momento, la normativa italiana, al contrario de, como se ha mencionado, otros países de su entorno, no permite la posibilidad de obtener el visado a través de la inversión en activos inmobiliarios.

Además, las inversiones deben ser, en términos generales, realizadas en una sola entidad o proyecto.

Asimismo, existen ciertos umbrales que se deberán alcanzar con las anteriores inversiones/donaciones para cumplir con los requisitos de inversión mencionados. Estos umbrales mínimos, desde 2018, han quedado fijados en los siguientes importes:

• 500.000 Euros para inversiones en compañías italianas.
• 250.000 Euros para inversiones en start-ups italianas.
• 2.000.000 Euros para inversiones en bonos del gobierno italiano.
• 1.000.000 Euros para donaciones filantrópicas.

Procedimiento de solicitud

El primer paso para poder optar a la obtención de una Golden Visa es la obtención de la denominada «Nulla Osta». Esto no es más que una certificación que prueba que no hay impedimentos para la obtención del visado en cuestión. Para poder obtener esta certificación deberán seguirse los siguientes pasos:

1. Comenzar el procedimiento de solicitud en la página web oficial del gobierno italiano.
2. Escanear y enviar la documentación necesaria (estos documentos se detallan más adelante en el presente artículo).
3. Descargar la certificación final y firmarla antes de su presentación

Una vez se haya presentado toda la documentación, las autoridades italianas procederán a su revisión. Cuando se verifique que la documentación está en orden, se obtendrá una respuesta a la concesión de la «Nulla Osta» en un plazo de 30 días.

Y una vez se haya conseguido la «Nulla Osta», se contará con 6 meses para solicitar el visado en alguna de las embajadas u oficinas consulares italianas.

Para ello, será necesario adjuntar la obtención de la «Nulla Osta», así como copias de los documentos adjuntos para la solicitud de dicho certificado.

Una vez se haya presentado esta solicitud, las autoridades italianas concederán la referida Golden Visa.

En relación con lo anterior, la documentación a adjuntar para cada uno de los dos trámites anteriores será la siguiente:

Obtención de la Nulla Osta:

• Copia del pasaporte, que muestre claramente el nombre, fotografía, fecha de emisión y vencimiento del mismo y número de pasaporte.
• Un Curriculum Vitae en el que conste la principal experiencia académica y profesional del interesado.
• Documentación que acredite:
  • Que se cuenta con los recursos financieros que se invertirán/donarán. Un ejemplo de esto sería un certificado de estado de cuenta bancario, que incluya el nombre del interesado y los fondos disponibles.
  • Que los recursos económicos demostrados sean lícitos y transferibles. Una carta oficial del banco/institución financiera donde se encuentran los activos declarando que se han realizado controles adecuados sobre el interesado de acuerdo con los estándares internacionales sería suficiente.
  • Que no se cuenta con antecedentes penales. Sería necesaria una declaración emitida por las autoridades competentes del país de origen del solicitante.
• Una descripción de la naturaleza de la inversión/donación y la experiencia pasada del interesado como donante o inversionista.
• Prueba del consentimiento del receptor de la inversión o donación.
• Una Declaración de Compromiso de uso de los fondos firmada electrónicamente. Deberá indicarse la cantidad de dinero que se invertirá y el lugar de establecimiento del interesado en Italia.

Obtención final de la Golden visa:

• Copia de la «Nulla Osta» junto con todas las copias impresas originales de los documentos enumerados anteriormente.
• Prueba de que se cuenta con alojamiento en Italia.
• Comprobante de ingresos del ejercicio anterior. Los ingresos del interesado deben cubrir el umbral mínimo para la exención de los gastos de atención médica. Son unos 8.500€ aproximadamente.
• Una foto tamaño pasaporte
• Copia del pasaporte en vigor.
• Prueba de residencia en el país de origen del interesado.

Todos los documentos adjuntados deberán estar en italiano o inglés o, en caso contrario, aportar una traducción jurada de los mismos.

Duración y renovación

Una vez obtenida la visa, se deberá viajar a Italia para asistir oficialmente a las instalaciones de las autoridades policiales italianas y pedir el permiso de residencia al que da derecho la Golden Visa. Este permiso de residencia será válido por un periodo de dos años desde el momento de entrada en territorio italiano.

Debe tenerse en cuenta que también habrá un plazo de tres meses desde la solicitud del permiso de residencia para realizar la inversión comprometida. En caso de no materializarse esta inversión, se revocará la Golden Visa.

Además, deberá mantenerse la inversión durante el periodo de estancia en Italia.

La renovación de la Golden Visa se podrá solicitar 60 días antes de que expire la original a través de la web del gobierno italiano. La duración de esta renovación durará otros 3 años más.

Una vez completado este periodo de residencia, se podrá solicitar un nuevo permiso de residencia de largo plazo.

Ventajas de la Golden visa italiana

Tal y como se ha expuesto, la Golden Visa italiana es una manera muy ventajosa de acceder a una de las mayores potencias económicas a nivel mundial, sin necesidad de pasar excesivos trámites burocráticos.

También se deben valorar, entre otras, las siguientes ventajas:

• Se podrá beneficiar de la posibilidad de viajar libremente a países incluidos en la zona Schengen.
• Se podrá acceder a la posibilidad de ser nacional italiano tras 10 años de residencia, con lo que ello supone en términos de acceso a la libre circulación de capitales y de personas en toda la Unión Europea.
• Se puede acceder a un gran mercado laboral, dado que nada excluye la posibilidad de trabajar mientras se disfruta de este visado.

¿Qué impuestos pagaré en Italia?

Dado que el permiso de residencia en Italia requiere, en principio, la estancia del beneficiado en dicho país durante más de 183 días, a efectos fiscales, esta persona tributará en Italia por la renta que obtenga en todo el mundo (tributación por renta mundial).

No obstante, Italia cuenta con un par de opciones muy interesantes de cara a mitigar el impacto fiscal:

• Régimen fiscal italiano para jubilados extranjeros: este régimen ofrece la posibilidad de reducir la tributación de todas las rentas obtenidas por el beneficiario fuera de Italia a un tipo impositivo del 7%.
• Flat tax italiano: este régimen permite a todos aquellos extranjeros que trasladen su residencia a Italia tributar por todos los ingresos que no sean de fuente Italiana a un importe fijo de 100.000 Euros. Además, se podrán excluir de esta tributación aquellas rentas que se deseen («cherry picking») y conlleven deducciones u otras ventajas.

Con estos dos regímenes, por tanto, maridan estupendamente con el permiso de residencia a través de la Golden Visa, pues permitirán hacer aun más atractivo el desplazamiento de la residencia fiscal al país transalpino.

¿Cómo dar el primer paso?

Nuestro equipo local de profesionales en fiscalidad italiana puede asistirle en la consecución de su Golden Visa italiana, así que si está planteándose esta opción no dude en contactarnos mediante el formulario o escribiéndonos a [email protected].